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Uno de nuestros bloques de trabajos es el de suelos y tarimas. En otras ocasiones, ya hablamos acerca de los usos y características del suelo laminado. Hoy, vamos a hablar sobre los suelos de vinilo.
La colocación de suelos de vinilo ha estado denostada durante muchos años. Era un material que no gozaba de demasiada popularidad, al considerarse poco profesional y estético. Actualmente, la situación ha cambiado y se trata de una de las tendencias en suelos del momento.
El suelo de vinilo (o PVC) es un tipo de suelo sintético. Por lo tanto, no se deforma con la humedad, como les ocurre a los suelos laminados. Es fácilmente amoldable a diferentes diseños o texturas, pudiendo imitar, incluso, el acabado que ofrece la madera.
Como decíamos, su principal ventaja es la de que no se deforma ante la humedad. Es una superficie que aguanta bien el derrame de líquidos o los continuos lavados sobre ella. A mayores, es un material muy resistente, por lo que resulta difícil rayar o estropear este tipo de suelos, lo que les concede una amplia durabilidad.
En cuanto a sus características de seguridad. Este tipo de suelos tienen muy baja conductividad y son incombustibles, al contrario que los de madera. Además, son superficies antideslizantes, por lo que se puede caminar por encima de ellas sin peligro ni riesgo. Todo esto hace que sea una opción muy buena para apostar por la seguridad del suelo.
Por ejemplo, los hospitales suelen tener suelos de vinilo. Además, al ser este material perfectamente resistente a los efectos de la mayoría de sustancias químicas, también es uno de los favoritos en los laboratorios. En los centros comerciales o centros educativos y de formación también se utilizan mucho, al ser antideslizantes garantizan que los compradores o visitantes no sufran accidentes dentro del propio centro.
Y, por otro lado, este tipo de suelos es altamente recomendado en aquellos sitios más húmedos o más susceptibles de mojarse. Por ejemplo, en las viviendas se utilizan sobre todo en las cocinas y en los baños.
El baño de una casa es un espacio en el que inevitablemente la humedad va a condensarse prácticamente todos los días. Un suelo de madera puede quedar estético, pero se terminaría estropeando y deformando a los pocos meses. Aparte, por seguridad, es mucho mejor utilizar un suelo antideslizante, ya que el baño es la zona del hogar en la que más accidentes domésticos se producen.
Las cocinas, por otro lado, suelen mancharse bastante. Es la parte de la casa que más hay que limpiar, ya que es la que más se ensucia cuando se prepara la comida. Por eso es un lugar idóneo para instalar los suelos de vinilo, ya que la fregona puede terminar por estropear los suelos de madera.
Otra de las ventajas de apostar por este tipo de suelos es que puedes gastarte lo que quieras. Nosotros, como una empresa de instalación de suelos de vinilo en Albacete, no solo trabajamos con una marca. Pergo suele ser la más clásica y la más utilizada, pero en función de los gustos y de las necesidades de cada cliente, podemos adaptarnos a ellos y ofrecerles otro tipo de marcas, como por ejemplo Gerflor, Tauro floors, etc.
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